Coordinación de la Investigación Científica 

Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo

No hay evidencias de que el Popocatépetl entre en una fase eruptiva más violenta: Investigadoras

• Especialistas de la UMSNH comparten que la tendencia es a disminuir, pero llaman a la población a mantenerse pendiente de informes.

Morelia, Michoacán, a 29 de mayo de 2023.- “Por el momento no hay evidencias de que el volcán Popocatépetl vaya a entrar en una fase eruptiva más violenta, observando una tendencia a disminuir”, informaron las doctoras Ana Teresa Mendoza Rosas y Martha Gabriela Gómez Vasconcelos, del Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Tierra (INICIT) de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).

Compartieron que el volcán -ubicado en el límite entre los estados de México, Puebla y Morelos- es considerado como uno de los que representan mayor riesgo en México. “El Popocatépetl ha experimentado numerosas erupciones a lo largo de su historia (<730 mil años). Desde que se tiene registro se han identificado más de 20 erupciones históricas, y se tiene evidencia geológica de al menos nueve erupciones mayores en los últimos 23 mil años”.

Detalla el informe que, desde 1994 ha tenido periódicamente erupciones explosivas asociadas al crecimiento y destrucción de domos de lava en su cráter con diferentes niveles de intensidad. Estas erupciones han generado emisión de gases volcánicos, cenizas, flujos piroclásticos y lahares (flujos de lodo), lo que ha llevado a la implementación de medidas de seguridad y evacuaciones en las áreas circundantes del volcán.

Como parte de este episodio eruptivo, reflexionaron las especialistas, en los últimos meses se ha observado que la actividad del volcán ha aumentado gradualmente, particularmente en los últimos días, lo que ha provocado la caída de ceniza en las comunidades cercanas al volcán. “Este aumento de actividad se debe a la entrada de magma nuevo y con alto contenido de gases en el sistema, lo que ha generado actividad continua y ligeramente más explosiva de lo habitual con el fin de liberar la presión y energía acumulada”.

Precisa el documento que, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) sigue monitoreando constantemente su actividad para garantizar la seguridad de la población. El monitoreo consiste en la vigilancia del volcán y la identificación de diversos cambios en los parámetros físicos del volcán (sismos, gases, deformación, química de cuerpos de agua, etc.), con el apoyo de una amplia instrumentación como lo son 12 sismómetros, siete GPS, tres sensores Infrasónicos, nueve estaciones meteorológicas, cámaras térmicas y visuales.

Agrega que, el grupo de monitoreo y el Comité Científico asesor del Popocatépetl trabajan en conjunto para recopilar datos, analizar la actividad del volcán y emitir recomendaciones a las autoridades correspondientes.

“Para facilitar la comunicación entre autoridades, científicos y población, se ha implementado un sistema de alerta temprana que consiste en “el semáforo de alertamiento volcánico”, el cual favorece la toma de decisiones cuando se detecta un aumento en la actividad sísmica y volcánica. Gracias a estos esfuerzos, se ha mantenido informada a la población y se han tomado las medidas de seguridad necesarias como el establecer albergues, planes de evacuación y campañas de recomendaciones para proteger a las comunidades vulnerables”, detalla el informe.

El cual señala que, la fase actual de amarillo fase 3 es una fase de prevención, donde Protección Civil prepara personal, revisa las rutas de evacuación, implementa medidas preventivas contra la caída de ceniza, y visita las zonas vulnerables. También se tiene una comunicación constante con los aeropuertos con el fin de alertar al tráfico aéreo para evitar su afectación.

“Es importante destacar que las erupciones volcánicas son fenómenos naturales impredecibles y pueden variar en magnitud y comportamiento. No obstante, es esencial que las autoridades continúen monitoreando la actividad del volcán y tomando las medidas para proteger a las comunidades en riesgo. Se recomienda consultar fuentes confiables y actualizadas, como los organismos oficiales de monitoreo volcánico en México, para obtener información verídica sobre la actividad actual del volcán”, indica el informe de las investigadoras.