Cash. Fotografía de Imelda. Tomada de https://unsplash.com/photos/GcnPjvqRL18
La doble crisis sanitaria y económica que vive el mundo en la actualidad se ha visto acompañada en el caso de Europa por una crisis existencial. La pandemia actual ha puesto de manifiesto las limitaciones y debilidades del proyecto europeo de integración, prácticamente paralizado desde que en 1993 entrara en vigor el Tratado de Maastricht y todavía conmocionado por el arrollador avance de los populismos anti-europeístas en la mayoría de las naciones del continente. Una situación que, por el momento, se ha saldado con el abandono del Reino Unido, pero que si no se rectifica a tiempo podría acabar provocando el final de la Unión Europea (UE).